Textos que escribí para ser publicados para el tomo recopilatorio La boda de Superman (Febrero 2009), del que también fui traductor.
LA BODA DEL SIGLO
Todo un tópico, este título, pero es que en este volumen has podido leer uno de los momentos más emblemáticos de la historia del hombre de acero. Si la muerte y posterior regreso del personaje (en La Muerte de Superman, publicado por Planeta DeAgostini) supusieron un punto de inflexión, no solo en la trayectoria de Superman, sino en el futuro devenir de otros muchos héroes que copiarían la fórmula de “matar” a los personajes en sagas concretas, La Boda de Superman supuso el fin de una era y marcó, una vez más, un nuevo referente.
En cierto cómic publicado en 1938 (fechado en junio pero aparecido en abril), Superman y su alter ego Clark Kent ya mostraban un más que claro interés amoroso por la periodista (por aquel entonces, escritora de cotilleos y noticias rosa) del Daily Star, Lois Lane. Ella despreciaba a Clark por su aparente timidez, torpeza y cobardía, en un contexto histórico en el que los hombres estaban muy por encima de las mujeres en la sociedad (tomemos como ejemplo que, en los USA, no se obtuvo el sufragio universal hasta 1965), y estas cualidades “afeminadas” en un caballero, eran de muy poco agrado para las féminas. En cambio, Lois empezaría bien pronto a sentirse atraída por el magnífico, forzudo y agresivo justiciero que era Superman, comenzando así un triángulo amoroso que fue una de los pilares de las aventuras del hombre del mañana durante toda la Edad de Oro y la Edad de Plata. Lois está enamorada de Superman pero desprecia a Clark; Clark intenta ganarse a Lois pero tiene que fingir ser de un modo que ella detesta para no descubrirse como Superman; y como Superman mantendrá siempre una relación sentimental con la reportera sin revelarle el secreto de su identidad.
La historia clásica contenida en este recopilatorio, originalmente publicada en el Action Comics #484 en junio de 1978, fue escrita por Cary Bates y dibujada por el legendario Curt Swan y Joe Giella. En ella se nos muestra el clímax de esa historia de amor que se esbozara en el Action Comics #1, con un desenlace perfecto a la par que curioso. Lois se enamora finalmente de Clark, pero de un Clark que ha cambiado, que reúne ahora más cualidades de Superman que de sí mismo: es valeroso, audaz, comienza una cruzada contra el hampa… Todo esto hará que Lois acepte su invitación de salir y que entre ellos surja la chispa que no habría saltado por el pobre y apocado reportero. No obstante, Lois acabará conociendo la verdad y convirtiéndose, aunque de rebote, en la Sra. de Superman, como siempre había soñado. Eso sí, para que esta historia no condicionara las futuras aventuras del personaje, se desarrolló en Tierra-2, uno de los incontables y recurrentes mundos paralelos que existían antes de Crisis en las tierras infinitas. Pese a ser casi idéntica a Tierra-1, en la que se desarrollaban el resto de andanzas de Superman, tenía su propia historia y permitía estas licencias argumentales, al no ser el escenario de la continuidad habitual. Lo triste de esta historia de amor es que terminaría de un modo trágico, al ser Tierra-2 uno de los mundos que desaparecieron en la Crisis en las tierras infinitas, quedándose Superman y Lois confinados en un espacio interdimensional, tras haber visto morir a todo su universo. Superman acabaría perdiendo el juicio al morir también su esposa muchos años después, y decidiría que tenía que recuperar su mundo y su vida. De este modo acabaría convirtiéndose en uno de los ejes de la posterior Crisis Infinita, cuyos acontecimientos aún están sacudiendo el Universo DC con la última parte de la trilogía de las crisis, Crisis Final, que se publica actualmente en los Estados Unidos.
Desde el principio, casar a Lois y Superman fue uno de los alicientes que tenían las historias clásicas. Pero claro, para estos acontecimientos se debía recurrir a fantasías y sueños de los protagonistas o, ya algunos años más tarde, a las tierras paralelas o las historias imaginarias. Una buena muestra es la aventura publicada en mayo de 1943 en el Action Comics #60, Lois Lane, Superwoman (incluida en Los Archivos de Superman número 4, de Planeta DeAgostini) En ella, de la mano de Jerry Siegel, John Sikela y Ed Dobrotka, Lois deliraba con tener superpoderes y casarse con Superman, después de sufrir un tremendo golpe en la cabeza. La serie televisiva Las aventuras de Superman (1952-1958) repetiría un argumento similar en uno de los episodios más recordados, titulado precisamente La boda de Superman, y que se emitió el 12 de mayo de 1956. Obsesionada con las historias de novela rosa, Lois (Noel Neil) se queda dormida y sueña que acaba casándose con Superman (George Reeves). ¡Cuál no será su decepción al despertarse!
Y coincidiendo con la publicación original en los USA de La Boda de Superman, se pudo ver nada menos que la boda televisada. La serie Lois y Clark, las nuevas aventuras de Superman, celebraba el enlace de la pareja de intrépidos periodistas en el tercer episodio de la cuarta temporada, emitido el 6 de octubre de 1996. Después de no pocos problemas e incluso con tensión hasta el último momento, Lois Lane (Teri Hatcher) y Clark Kent (Dean Cain) contraían matrimonio en un episodio que se emitía casi simultáneamente a la aparición del cómic en el que se celebraba la “auténtica” boda. Esta vez no fue un sueño, ni una alucinación, ni un mundo alternativo: Lois y Clark se casaban en la ficción televisiva y en la continuidad real del cómic, poniendo así el broche de oro a 58 años de noviazgo, con momentos para el recuerdo como el compromiso por parte de los dos de compartir su vida juntos (originalmente en el Superman #50, de diciembre de 1990, que se vio en el número 40 del Coleccionable Las aventuras de Superman), o la confesión de Clark a Lois de su identidad secreta de Superman (Action Comics #661, febrero 1991). Como curiosidad, a su boda en el cómic acudieron como invitados, aparte de los personajes más habituales de su entorno, todos los miembros del equipo de DC Comics de aquellos momentos. En el precioso tríptico que culmina la ceremonia, puedes encontrar entre los asistentes a dibujantes, guionistas y hasta familiares de los mismos: Dan Jurgens, John Byrne, Stuart Immonen, Jerry Ordway, Louise Simonson, Jon Bogdanove, Mike Carlin, Paul Levitz, Roger Stern, e incluso Joe Shuster son algunos de los rostros que reconoceremos. Y, quien oficia la boda como sacerdote, no es otro que Jerry Siegel. Todo un detalle, que les casara la misma persona que los ideara sesenta años atrás.
Si vivieron felices para siempre, eso es algo que ya hemos podido ver en muchas aventuras posteriores y que continuamos viendo hoy en día en todas las colecciones del hombre de acero. Pero lo que les deparó el futuro inmediato y lo que les deparará de hoy en adelante, no es lo que nos ocupa. De momento, y por lo que aquí respecta… ¡que vivan los novios!
LA BODA DEL SIGLO
Todo un tópico, este título, pero es que en este volumen has podido leer uno de los momentos más emblemáticos de la historia del hombre de acero. Si la muerte y posterior regreso del personaje (en La Muerte de Superman, publicado por Planeta DeAgostini) supusieron un punto de inflexión, no solo en la trayectoria de Superman, sino en el futuro devenir de otros muchos héroes que copiarían la fórmula de “matar” a los personajes en sagas concretas, La Boda de Superman supuso el fin de una era y marcó, una vez más, un nuevo referente.
En cierto cómic publicado en 1938 (fechado en junio pero aparecido en abril), Superman y su alter ego Clark Kent ya mostraban un más que claro interés amoroso por la periodista (por aquel entonces, escritora de cotilleos y noticias rosa) del Daily Star, Lois Lane. Ella despreciaba a Clark por su aparente timidez, torpeza y cobardía, en un contexto histórico en el que los hombres estaban muy por encima de las mujeres en la sociedad (tomemos como ejemplo que, en los USA, no se obtuvo el sufragio universal hasta 1965), y estas cualidades “afeminadas” en un caballero, eran de muy poco agrado para las féminas. En cambio, Lois empezaría bien pronto a sentirse atraída por el magnífico, forzudo y agresivo justiciero que era Superman, comenzando así un triángulo amoroso que fue una de los pilares de las aventuras del hombre del mañana durante toda la Edad de Oro y la Edad de Plata. Lois está enamorada de Superman pero desprecia a Clark; Clark intenta ganarse a Lois pero tiene que fingir ser de un modo que ella detesta para no descubrirse como Superman; y como Superman mantendrá siempre una relación sentimental con la reportera sin revelarle el secreto de su identidad.
La historia clásica contenida en este recopilatorio, originalmente publicada en el Action Comics #484 en junio de 1978, fue escrita por Cary Bates y dibujada por el legendario Curt Swan y Joe Giella. En ella se nos muestra el clímax de esa historia de amor que se esbozara en el Action Comics #1, con un desenlace perfecto a la par que curioso. Lois se enamora finalmente de Clark, pero de un Clark que ha cambiado, que reúne ahora más cualidades de Superman que de sí mismo: es valeroso, audaz, comienza una cruzada contra el hampa… Todo esto hará que Lois acepte su invitación de salir y que entre ellos surja la chispa que no habría saltado por el pobre y apocado reportero. No obstante, Lois acabará conociendo la verdad y convirtiéndose, aunque de rebote, en la Sra. de Superman, como siempre había soñado. Eso sí, para que esta historia no condicionara las futuras aventuras del personaje, se desarrolló en Tierra-2, uno de los incontables y recurrentes mundos paralelos que existían antes de Crisis en las tierras infinitas. Pese a ser casi idéntica a Tierra-1, en la que se desarrollaban el resto de andanzas de Superman, tenía su propia historia y permitía estas licencias argumentales, al no ser el escenario de la continuidad habitual. Lo triste de esta historia de amor es que terminaría de un modo trágico, al ser Tierra-2 uno de los mundos que desaparecieron en la Crisis en las tierras infinitas, quedándose Superman y Lois confinados en un espacio interdimensional, tras haber visto morir a todo su universo. Superman acabaría perdiendo el juicio al morir también su esposa muchos años después, y decidiría que tenía que recuperar su mundo y su vida. De este modo acabaría convirtiéndose en uno de los ejes de la posterior Crisis Infinita, cuyos acontecimientos aún están sacudiendo el Universo DC con la última parte de la trilogía de las crisis, Crisis Final, que se publica actualmente en los Estados Unidos.
Desde el principio, casar a Lois y Superman fue uno de los alicientes que tenían las historias clásicas. Pero claro, para estos acontecimientos se debía recurrir a fantasías y sueños de los protagonistas o, ya algunos años más tarde, a las tierras paralelas o las historias imaginarias. Una buena muestra es la aventura publicada en mayo de 1943 en el Action Comics #60, Lois Lane, Superwoman (incluida en Los Archivos de Superman número 4, de Planeta DeAgostini) En ella, de la mano de Jerry Siegel, John Sikela y Ed Dobrotka, Lois deliraba con tener superpoderes y casarse con Superman, después de sufrir un tremendo golpe en la cabeza. La serie televisiva Las aventuras de Superman (1952-1958) repetiría un argumento similar en uno de los episodios más recordados, titulado precisamente La boda de Superman, y que se emitió el 12 de mayo de 1956. Obsesionada con las historias de novela rosa, Lois (Noel Neil) se queda dormida y sueña que acaba casándose con Superman (George Reeves). ¡Cuál no será su decepción al despertarse!
Y coincidiendo con la publicación original en los USA de La Boda de Superman, se pudo ver nada menos que la boda televisada. La serie Lois y Clark, las nuevas aventuras de Superman, celebraba el enlace de la pareja de intrépidos periodistas en el tercer episodio de la cuarta temporada, emitido el 6 de octubre de 1996. Después de no pocos problemas e incluso con tensión hasta el último momento, Lois Lane (Teri Hatcher) y Clark Kent (Dean Cain) contraían matrimonio en un episodio que se emitía casi simultáneamente a la aparición del cómic en el que se celebraba la “auténtica” boda. Esta vez no fue un sueño, ni una alucinación, ni un mundo alternativo: Lois y Clark se casaban en la ficción televisiva y en la continuidad real del cómic, poniendo así el broche de oro a 58 años de noviazgo, con momentos para el recuerdo como el compromiso por parte de los dos de compartir su vida juntos (originalmente en el Superman #50, de diciembre de 1990, que se vio en el número 40 del Coleccionable Las aventuras de Superman), o la confesión de Clark a Lois de su identidad secreta de Superman (Action Comics #661, febrero 1991). Como curiosidad, a su boda en el cómic acudieron como invitados, aparte de los personajes más habituales de su entorno, todos los miembros del equipo de DC Comics de aquellos momentos. En el precioso tríptico que culmina la ceremonia, puedes encontrar entre los asistentes a dibujantes, guionistas y hasta familiares de los mismos: Dan Jurgens, John Byrne, Stuart Immonen, Jerry Ordway, Louise Simonson, Jon Bogdanove, Mike Carlin, Paul Levitz, Roger Stern, e incluso Joe Shuster son algunos de los rostros que reconoceremos. Y, quien oficia la boda como sacerdote, no es otro que Jerry Siegel. Todo un detalle, que les casara la misma persona que los ideara sesenta años atrás.
Si vivieron felices para siempre, eso es algo que ya hemos podido ver en muchas aventuras posteriores y que continuamos viendo hoy en día en todas las colecciones del hombre de acero. Pero lo que les deparó el futuro inmediato y lo que les deparará de hoy en adelante, no es lo que nos ocupa. De momento, y por lo que aquí respecta… ¡que vivan los novios!
Javier Olivares Tolosa
CONTRAPORTADA
Si crees que la expresión “boda del siglo” no es más que un eufemismo, espera y verás. Muchos de los mejores guionistas y dibujantes de la historia del Hombre de Acero se convirtieron en padrinos de excepción de este esperado enlace. Un enlace que ponía punto y seguido al romance más largo del noveno arte, después de casi sesenta años de que Lois Lane y Clark Kent se conocieran.
Acompaña a los novios en el difícil camino hasta el altar. Siéntate en primera fila en la Catedral de Metropolis para escuchar el “sí, quiero”. Y viaja a Hawai con los recién casados para vivir una aventura incluso en la luna de miel.
Este es el día en que Superman se casa. Y estás invitado.