Textos escritos para el tomo Supergirl: Orígenes (Marzo 2008). Por error de coordinación (aquellos viejos tiempos de Planeta...) los textos para este tomo se nos encargaron a dos articulistas. El packager, a la hora de la maquetación, seleccionó dos al azar, y los míos quedaron fuera y se publicaron posteriormente en la web de Planeta.
¿QUIÉN DIJO QUE SER JOVEN ERA FÁCIL?
En este cuarto tomo de Supergirl, Orígenes, arranca un nuevo arco argumental que va a resultar crucial para el personaje. Hasta ahora, hemos visto en números anteriores como la chica de acero se enfrentaba a los problemas de adaptación que todo adolescente suele atravesar, con la dificultad añadida que supone la enorme responsabilidad que conllevan sus poderes. Kara trata de encontrar su lugar en un mundo que no es el suyo y de demostrar que es merecedora de la S que luce en el pecho. Y todo ello mientras continúa madurando como persona y como heroína, con la particularidad de que, en ocasiones, lucir dicha S es para ella una pesada carga que no está muy segura de querer asumir. Pese a sus poderes, Kara solo es una chica joven con ganas de divertirse y de encajar, y con las mismas posibilidades de cometer errores que cualquier otro adolescente. Y eso no es nada fácil de llevar cuando tu primo, la persona ante la que respondes, es nada menos que Superman.
Por si no tuviera ya pocas preocupaciones (sin olvidarnos de la divertida relación que tiene con su indomable gato, Streaky), ahora comienzan para ella los problemas sentimentales, también tan característicos de esta complicada edad. Pero es evidente que, cuando vienes de otro planeta, puedes volar y mover montañas, nada de lo que te ocurra va a ser… característico.
En el anterior volumen, Amor a primera vista, se presentó un personaje que va a complicar aún más la vida de Supergirl. Se trata de Power Boy, otro superhéroe adolescente que, al menos en una primera impresión, parece ser todo lo que una superchica como Kara puede necesitar: vuela, posee superfuerza, un carisma arrollador y está absolutamente enamorado de ella. Aparentemente son la pareja ideal, y Supergirl, cómo no, ha caído entre sus brazos. Pero hay una línea divisoria muy fina entre el amor y la obsesión, y no vamos a adelantar acontecimientos, pero en las próximas páginas vais a ver cómo el novio perfecto también esconde peligrosos secretos. Si en la viñeta final del último tomo ya vimos que Power Boy llevaba demasiado lejos su obsesión por Kara, en esta nueva entrega vais a comprender hasta qué punto y por qué. No obstante no hay que olvidar que Kara Zor-El es, ante todo, una chica fuerte e independiente, y de ningún modo va a dejar que un hombre dirija su destino. Que le pregunten a su primo Kal, si no.
Y dado que Power Boy va a tener marcado protagonismo en esta historia que estáis a punto de leer, vamos a conocerlo un poco más, ya que varios personajes han tenido ese nombre desde la primera vez que se usó en los años 50.
El primer Power Boy se llamaba Zarl Vorne. Nacido en Atlantis, la historia publicada en Superboy núm. 52, de 1956, narra como sus padres lo enviaron al asteroide Juno para evitar que pereciera junto al resto de la ciudad, en un origen muy similar al de Superman.
En los años 80, el personaje de Jedediah Rikane asumió el nombre Power Boy. Dotado de una fuerza increíble, fue un estudiante de la Academia de la Legión de Superhéroes en el siglo XXX que no llegó a convertirse en legionario, pero sí en instructor de aspirantes. El personaje moriría asesinado mientras defendía las minas de pluridio de Xolnar.
Y el tercer y último Power Boy es el que podemos ver en esta colección. En la serie semanal 52, que también publica Planeta DeAgostini, y concretamente en la semana 21, el personaje aparece como miembro de los Jóvenes Titanes. Para un lector atento, esta primera aparición ya daría indicios de su origen: Power Boy trata familiarmente con Little Barda, y utiliza la exclamación “por los testículos de Darkseid…”. Así que su relación con el planeta Apokolips es evidente, pero será en la historia que estáis a punto de leer, cuando conozcamos su verdadero origen y la razón de su obsesión por Supergirl. Recordad que la joven de acero ya tuvo que vérselas con Darkseid en una saga que se desarrolló en el volumen 1 de Superman/Batman. En aquella historia, Darkseid se hizo con el control de Supergirl, prácticamente recién llegada a nuestro planeta, y la llevó hasta Apokolips con el propósito de que sirviera a sus fines. Superman y Batman tuvieron que rescatarla, y Darkseid acabó derrotado y atrapado en el Muro de la Fuente. El tiempo que pasó prisionero en aquel lugar tendría para el villano un efecto secundario imprevisto, que dará pie a un nuevo arco argumental de Superman/Batman que será publicado próximamente por Planeta DeAgostini.
También en la historia que estáis a punto de empezar, Supergirl va a tener que enfrentarse (y literalmente, ya lo veréis), con los fantasmas de su pasado. Nuevos detalles sobre el origen kryptoniano de la chica de acero serán revelados, así como más datos sobre su genealogía y su misión en La Tierra. Y además, esta excepcional trama sirve como despedida a Joe Kelly, el guionista responsable de haber devuelto a Supergirl a lo más alto. Pero lo que está por venir en el futuro de la chica de acero… eso es otra historia.
Javier Olivares Tolosa
SUPERGIRL: PASADO, PRESENTE Y FUTURO
Zor-El y Allura, los padres de Kara, son dos personajes cuya historia en el universo DC se remonta muy atrás. La primera aparición de Zor-El se dio en el mismo cómic que presentó a Supergirl en mayo de 1959, el Action Comics 252, un número que hoy en día es todo un clásico, y que también mostró la primera aparición del villano Metallo.
Antes de la Crisis en las tierras infinitas, cuando Krypton era un mundo idílico y súper avanzado, Zor-El, hermano de Jor-El, era un reputado científico experto en clima, y una de las pocas personas que creían en la teoría de Jor-El sobre la inevitable destrucción que se cernía sobre el planeta. Cuando finalmente ocurrió la tragedia y Krypton explotó, un gran pedazo del mismo se desprendió intacto, y en él permanecieron supervivientes que lograron subsistir, protegidos por una cúpula, como un pequeño planeta independiente a la deriva. Aquel fragmento desprendido de Krypton era Argo City, la ciudad en la que residía Zor-El con su esposa Allura. Los peligros para aquellos escasos supervivientes de Krypton no terminarían, ya que todo el suelo se transformaría en el mineral radiactivo que los envenenaba: la kryptonita. Zor-El fue quien tuvo la idea de cubrir el suelo del planeta con planchas de plomo que no dejaban pasar la radiación, y de este modo Argo City continuó largo tiempo con su casi milagrosa existencia.
Años más tarde, una tormenta de meteoritos provocó enormes daños en la estructura de plomo que protegía el suelo, y la radiación comenzó a afectar a los ciudadanos. Zor-El y Allura, viendo que aquello era el final del sueño de supervivencia para los afortunados ciudadanos de Argo, decidieron que su hija, nacida durante aquellos años felices, no tenía por qué perecer allí. Así que tras descubrir el planeta al que su hermano había enviado a su hijo Kal-El años antes, y donde éste se había criado y convertido en su protector, Zor-El mandó a Kara a La Tierra. Kara contaba unos 16 años de edad, y su madre le hizo un traje similar al de Superman para que éste no tuviera la más mínima duda de su procedencia. Y aunque fue el fin de Argo City, tampoco sería el fin de Zor-El y Allura, que sobrevivirían en una zona fantasma alternativa y serían posteriormente rescatados por su propia hija.
La historia moderna de Supergirl tiene importantes diferencias con respecto a la clásica. Pudimos ver la llegada de la chica de acero a nuestro planeta en el volumen 1 de Superman/Batman, de la mano de Jeph Loeb y Michael Turner. En esta nueva versión, Kara era enviada a La Tierra por Zor-El incluso antes de que Jor-El mandara a su hijo. La intención era que la propia Kara ayudara a criar al niño, ya que ella tenía 16 años y Kal viajaba en una cámara de gestación, produciéndose su nacimiento ya en nuestro mundo. Pero la nave en la que viajaba Kara quedó atrapada en un meteorito, permaneciendo durante años en animación suspendida, y llegando a La Tierra cuando Kal-El ya era el adulto conocido como Superman. El duro golpe que esto supuso para Supergirl es algo que ya habéis podido ver los lectores habituales.
Este nuevo origen y actitud del personaje está siendo utilizado como referente para la serie televisiva Smallville, que en su actual séptima temporada ha introducido el personaje de Kara Zor-El con la misma historia que vimos en Superman/Batman, y puesto que Jeph Loeb, el guionista de aquella saga que trajo de vuelta a Supergirl en el cómic, es consultor creativo para Smallville. La aparición de la chica de acero en la serie, interpretada por la actriz canadiense Laura Vandervoort, ha sido de gran agrado para los seguidores tanto del personaje como de la propia serie, que ha podido enriquecer así sus argumentos y permitirse explorar un poco más la historia de Krypton. Como curiosidad, la actriz Helen Slater, que fue Supergirl en la película de 1984, ha aparecido en esta temporada interpretando a Lara, la madre biológica de Clark y tía de Kara, en una trama que ha incluido también al personaje de Zor-El con un sorprendente giro argumental que lo convierte en un personaje malvado y vengativo, capaz incluso de tratar de asesinar a su propio hermano.
Y si este tomo cierra la etapa de Joe Kelly como guionista de la colección, que tanto ha aportado al personaje, el próximo volumen traerá recopiladas nuevas aventuras bajo un nuevo equipo formado por Tony Bedard y Renato Guedes. Un tándem que, de momento, ya está dando que hablar por el realista dibujo de Renato Guedes, presentando a una Supergirl mucho menos delgada y atlética y de belleza más sencilla y natural. Esta etapa comienza en el número 21 de la edición americana, así que nos queda suelto el 20, una aventura directamente relacionada con la miniserie El Ataque de las amazonas, que próximamente publicará Planeta DeAgostini. Así que, para que no quede la sensación de que ese número está fuera de contexto dentro de los próximos arcos argumentales de Supergirl, será incluido precisamente en El ataque de las amazonas, donde encaja a la perfección.
Javier Olivares Tolosa