Publicado en Superman/Batman Vol. 2 núm. 19 (Enero 2009)
ANTERIORMENTE EN SUPERMAN
Lana Lang, ahora presidenta de Lexcorp, es secuestrada en su oficina por un insecto gigante. Tras la pista del robo de unos productos químicos, Superman es atacado por insectos obreros y descubre que tienen base en la luna, donde retienen a Lana, que ha sido elegida como nuevo cuerpo de la Reina Insecto, líder de una civilización similar a la de las abejas y engañada por Luthor. Superman caerá vencido por la Reina al intentar salvar a Lana, mientras que en Metropolis Chris hace explotar el apartamento de Lois y Clark por culpa del reloj de sol rojo.
EL HIJO DE SUPERMAN
De la imaginación de Geoff Johns y Richard Donner surgió para las páginas de Action Comics un personaje que se ha convertido en el eje central de la saga Último Hijo. Un niño engendrado por padres kryptonianos. Un niño al que, después de maltratarle durante años, sus progenitores han utilizado para escapar del presidio dimensional descubierto en su día por Jor-El, el padre biológico de Superman. Y es que el pobre chiquillo proviene de una familia con una larga tradición violenta: es el hijo del General Zod y Ursa, el antaño líder militar de Krypton transformado después en villano y su fiel y despiadada lugarteniente. Así pues, técnicamente hablando y como indica el título de la historia, él es el último hijo… si bien no de Krypton, sí de unos kryptonianos.
El nombre que le impusieron sus horribles padres fue Lor-Zod, pero tras su llegada a la Tierra y que Lois y Clark decidieran hacerse cargo de él, le crearon la nueva identidad de Christopher Kent (en un clarísimo homenaje de Richard Donner a Christopher Reeve). De este modo, la pareja de reporteros tendría la oportunidad de probarse como padres, con la dificultad añadida de cuidar de un niño que posee todos los poderes de Superman. A fin de que Christopher pudiera llevar una vida más normal, su nuevo padre adoptivo pediría la ayuda de Batman para diseñar un pequeño dispositivo que emitiera radiación de sol rojo, y que pudiera instalarse en un reloj que Chris llevaría siempre puesto (y cuyos “explosivos” efectos secundarios ya pudimos ver el mes pasado). De este modo, Chris ha podido disfrutar de una estancia placentera y humana en nuestro planeta, arropado por los mejores padres que un niño podría desear, conociendo a los más emblemáticos personajes del universo DC y recibiendo por fin el calor de una familia.
Y si estas palabras suenan a despedida es porque -aunque no vamos a revelar detalles- resulta evidente que la continuidad actual del hombre de acero acoge con dificultad que sea padre de forma duradera. Precisamente la existencia de un hijo de Superman y Lois (biológico, en este caso) en Superman Returns , fue uno de los puntos más criticados de la película de Bryan Singer; y es que la paternidad parece cerrar un círculo que, al menos de momento, necesita seguir abierto.
La incorporación de Christopher Kent ha permitido que atisbemos lo complicada que resulta la paternidad para Lois y Clark, y dejará, sin lugar a dudas, una profunda huella en Superman. En cualquier caso, Christopher Kent aún no ha dicho su última palabra y en un par de meses, con la conclusión de Último Hijo, nos demostrará que, aunque sea el hijo del General Zod, es de Superman de quien más cosas ha aprendido.
ANTERIORMENTE EN SUPERMAN
Lana Lang, ahora presidenta de Lexcorp, es secuestrada en su oficina por un insecto gigante. Tras la pista del robo de unos productos químicos, Superman es atacado por insectos obreros y descubre que tienen base en la luna, donde retienen a Lana, que ha sido elegida como nuevo cuerpo de la Reina Insecto, líder de una civilización similar a la de las abejas y engañada por Luthor. Superman caerá vencido por la Reina al intentar salvar a Lana, mientras que en Metropolis Chris hace explotar el apartamento de Lois y Clark por culpa del reloj de sol rojo.
EL HIJO DE SUPERMAN
De la imaginación de Geoff Johns y Richard Donner surgió para las páginas de Action Comics un personaje que se ha convertido en el eje central de la saga Último Hijo. Un niño engendrado por padres kryptonianos. Un niño al que, después de maltratarle durante años, sus progenitores han utilizado para escapar del presidio dimensional descubierto en su día por Jor-El, el padre biológico de Superman. Y es que el pobre chiquillo proviene de una familia con una larga tradición violenta: es el hijo del General Zod y Ursa, el antaño líder militar de Krypton transformado después en villano y su fiel y despiadada lugarteniente. Así pues, técnicamente hablando y como indica el título de la historia, él es el último hijo… si bien no de Krypton, sí de unos kryptonianos.
El nombre que le impusieron sus horribles padres fue Lor-Zod, pero tras su llegada a la Tierra y que Lois y Clark decidieran hacerse cargo de él, le crearon la nueva identidad de Christopher Kent (en un clarísimo homenaje de Richard Donner a Christopher Reeve). De este modo, la pareja de reporteros tendría la oportunidad de probarse como padres, con la dificultad añadida de cuidar de un niño que posee todos los poderes de Superman. A fin de que Christopher pudiera llevar una vida más normal, su nuevo padre adoptivo pediría la ayuda de Batman para diseñar un pequeño dispositivo que emitiera radiación de sol rojo, y que pudiera instalarse en un reloj que Chris llevaría siempre puesto (y cuyos “explosivos” efectos secundarios ya pudimos ver el mes pasado). De este modo, Chris ha podido disfrutar de una estancia placentera y humana en nuestro planeta, arropado por los mejores padres que un niño podría desear, conociendo a los más emblemáticos personajes del universo DC y recibiendo por fin el calor de una familia.
Y si estas palabras suenan a despedida es porque -aunque no vamos a revelar detalles- resulta evidente que la continuidad actual del hombre de acero acoge con dificultad que sea padre de forma duradera. Precisamente la existencia de un hijo de Superman y Lois (biológico, en este caso) en Superman Returns , fue uno de los puntos más criticados de la película de Bryan Singer; y es que la paternidad parece cerrar un círculo que, al menos de momento, necesita seguir abierto.
La incorporación de Christopher Kent ha permitido que atisbemos lo complicada que resulta la paternidad para Lois y Clark, y dejará, sin lugar a dudas, una profunda huella en Superman. En cualquier caso, Christopher Kent aún no ha dicho su última palabra y en un par de meses, con la conclusión de Último Hijo, nos demostrará que, aunque sea el hijo del General Zod, es de Superman de quien más cosas ha aprendido.
Javier Olivares Tolosa